martes, 7 de noviembre de 2017

Conclusión





Después de muchas horas, de escuchar, cuan diferentes eran, como no funcionaria, como no había eternidad en ese amor, ella llegó a una conclusión…

 Con desdén le dijo a su amiga:

“Pues yo solo te puedo decir, que es el único hombre en mi vida, que me ha hecho realmente feliz… Y quiero seguir siéndolo ya sean 5 minutos más o toda una vida, así de simple, así de complicado”

miércoles, 18 de octubre de 2017

Te tome una foto



A veces me preocupa, no tener una foto tuya, en la que muestre que te tengo en mi corazón, que te tengo entre mis brazos, que después de una larga semana, llega mi momento favorito; verte, abrazarte, decirte al oído “Mi amor, me encantas” y que me digas “Vos me fascinas”.

Así que un buen día, mientras descansabas en mi regazo, con tus ojos cerrados, me di a la tarea de tomarte una foto, con mis manos, acariciar tu cara, centímetro por centímetro; guardar en mi memoria cada uno de tus lunares, besarlos, para que mi corazón no olvidara su ubicación exacta.

Te tome una foto con mis manos, con mis besos, con mi mirada, una foto que me acompañara hasta mis últimos días.

lunes, 15 de mayo de 2017

1.Ser feliz es saber llorar




Cuando estaba en bachillerato, tuve un desacuerdo con dos compañeros, nos habían dejado hacer diagramas, asistía a clases por las tardes y pase toda la mañana creando ese diagrama, estaba tan emocionada que hasta se lo mostré a mi mamá, en la tarde comparando con dos compañeros, desestimaron mi tarea, se empezaron a burlar de mi (odio que se burlen de mí, es más lo detesto con todo mi ser), tome mi trabajo, me senté en mi escritorio y comencé a llorar.
Llego el director y vio todo lo que paso, para colmo nos llevaron a la dirección castigados “por pelear”, al día siguiente sin previo aviso llego mi mamá, nos volvieron a llevar a la dirección y en toda esa platica mi mamá dijo algo…

“Ustedes hicieron llorar a Danay, y yo he visto más a mis hijos varones llorar que a ella”

A mis 16 años me di cuenta de mi realidad, que no lloraba, que veía las cosas, sentía un inmenso nudo en mi garganta, limpiaba mi rostro y seguía como si nada.

Hoy a mis 26 años me doy cuenta que estoy en las mismas, pero ahora comprendo la importancia, de que, para ser feliz, debo de llorar un poco, porque todo eso, se nos acumula en el alma, nos carcome poco a poco; volviéndonos seres infelices, porque no viven su dolor, que creen que llorar los hace débiles y que en este mundo no se puede ser débil.

Está bien, estar mal; está bien, ser débil de vez en cuando.

Vale más llorar que reír, pues podrá hacerle mal al semblante pero le hace bien al corazón.

Manual para ser feliz


Esta serie de escritos tiene como fin responder una pregunta que hace poco me hice y que la publiqué en mi perfil de Facebook:


“Hay tantos libros que hablan como ser rico, como ser exitoso, como ser un mejor jugador de equipo… ¿Existirá un libro que te diga cómo ser feliz?”



Una vez una buena amiga me dijo escribe algo, que a vos te gustaría leer, eso haré quiero tener mi propio manual para ser feliz.

Aunque en este momento no sé cómo serlo, en el camino voy a descubrir cómo serlo, te invito a que me acompañes en este viaje.